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Las vacunas ARNm se han usado para salvar a la Big Pharma

20/01/2023

Escritor Español Petrusvil

Poeta, escritor, divulgador y analista.
Tiempo de lectura 9 minutos.
Las vacunas ARNm se han usado para salvar a la Big Pharma

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El verdadero propósito de las inyecciones masivas de ARNm no era «salvar vidas». Se trataba de normalizar un nuevo mercado farmacéutico de modificaciones genéticas de ARNm usándonos de conejillos de indias porque las patentes de los medicamentos «normales» estaban empezando a expirar y las ganancias farmacéuticas estaban cayendo en picado. (Las vacunas ARNm se han usado para salvar a la Big Pharma)

Las vacunas ARNm se han usado para salvar a la Big Pharma

Analicemos por qué el modelo de negocio de la Pharma estaba roto y se trataba de una industria al borde del declive terminal.

Analicemos por qué el modelo tradicional de la Big Pharma estaba roto

Al igual que muchas industrias, el modelo comercial de la industria farmacéutica depende fundamentalmente de la innovación productiva para crear valor al brindar mayores beneficios al cliente. Además, el crecimiento sostenible y la creación de valor dependen de una productividad constante en I+D con un ROI (rendimiento de la inversión) positivo para generar ingresos futuros que puedan volver a reinvertirse en I+D. En los últimos años, sin embargo, ha quedado claro que la industria farmacéutica tiene un problema grave con la disminución de la productividad en I+D  y de los beneficios junto con las patentes caducadas.

En la industria farmacéutica el período de inversión promedio es relativamente estable y está bien definido, ya que está impulsado en gran medida por un plazo de patente estándar fijo de 20 años, así como por una fase de I+D que puede durar entre 11 y 15 años de principio a fin. Así, el periodo medio de inversión es de unos 13 años, desde el punto medio de la fase de I+D después de 7 años, más otros 6 años para alcanzar el pico de ventas antes de perder la exclusividad.

También les ocurre a las farmacéuticas que necesitan invertir en muchos más proyectos en las primeras fases de los que invierten en las últimas, debido al desgaste natural dentro de la tubería de procesos  de I+D que ocasiona muchos proyectos desechados para alcanzar uno bueno.

Además, en la empresa farmacéutica el retorno neto de la inversión en I+D debe incluir no solo los beneficios resultantes (EBIT), sino también los costes futuros de I+D. Esto se debe a que el gasto futuro en I+D es un  uso de los beneficios que resultan de inversiones anteriores y que mantiene la dinámica de la continuidad futura de la empresa.

Así que ahora podemos calcular el rendimiento promedio de la inversión (IRR) ​​como el crecimiento anual compuesto en el valor de las inversiones pasadas en I+D al valor de las ganancias resultantes (EBIT)  más  los costos futuros de I+D, como se ilustra aquí a partir de los datos de P&L de la industria de EvaluatePharma:

Las vacunas ARNm se han usado para salvar a la Big Pharma

Las vacunas ARNm se han usado para salvar a la Big Pharma

Vemos que el retorno de la inversión en I+D farmacéutica está disminuyendo rápidamente. Vemos que esa tendencia a la baja es totalmente consistente con los informes publicados por Deloitte y BCG.

Ahora, lo más aterrador de este análisis es cuán sólida, consistente y rápida es la tendencia a la baja en el retorno de la inversión durante un período de más de 20 años. Pero además, estos resultados confirman que el retorno de la inversión en I+D farmacéutica ya está por debajo del coste del capital (Si, para un proyecto de inversión, el coste del capital es mayor que el rendimiento entonces no es rentable invertir en ese proyecto), y se prevé que llegue a  cero  en tan solo 2 o 3 años (Eso significa que sólo recuperaríamos lo invertido). Y esto a pesar de todos los esfuerzos de la industria por arreglar la I+D y revertir la tendencia.

Nota del autor: El estudio es del año 2017, hace ahora en 2023 seis años. Quiere decir que la Big Pharma ya estaba en declive terminal en 2020 cuando la crisis del coronavirus (me resisto a llamarlo pandemia).

Entonces, ¿qué está impulsando esta tendencia y por qué no han podido hacer nada al respecto?

Las vacunas ARNm se han usado para salvar a la Big Pharma

La ley de los rendimientos decrecientes

Se han sugerido muchas causas y factores diferentes para explicar la disminución constante en la productividad de I+D farmacéutica, incluido el aumento de los costos y los plazos de los ensayos clínicos, la disminución de las tasas de éxito en el desarrollo, un entorno regulatorio más estricto, así como una mayor presión de los pagadores, los proveedores y el aumento de los medicamentos genéricos. competencia, sin embargo, hay un problema fundamental en juego que une todos estos factores: la ley de rendimientos decrecientes.

La ley de rendimientos decrecientes dice que cada vez necesito aplicar más recursos (Inversión en I&D) para obtener el mismo rendimiento o que si sigo aplicando los mismos recursos mi rendimiento decaerá. ¡Es una ley, como la primera ley de la termodinámica, por eso siempre se cumple!

A medida que cada nuevo fármaco mejora el estándar de atención médica actual, esto solo eleva el nivel del siguiente fármaco, haciéndolo más costoso, difícil y poco probable de lograr una mejora incremental, al mismo tiempo que reduce el alcance potencial de la mejora. Por lo tanto, cuanto más mejoramos el estándar de atención médica, más difícil y costoso se vuelve mejorar aún más, por lo que gastamos más y más para sólo obtener beneficios incrementales decrecientes y aumenta el valor agregado para los pacientes, lo que resulta en una disminución del retorno de la inversión

En esencia, el descubrimiento de fármacos es como la extracción de petróleo, donde priorizamos y explotamos progresivamente las oportunidades más grandes, mejores, más baratas y más fáciles con los rendimientos esperados más altos en primer lugar, dejando las oportunidades menos atractivas con rendimientos más bajos para más tarde, para donde, eventualmente, nos quedaríamos gastando más valor del que posiblemente podamos extraer.

Imaginen que en vez de pozos de petróleo son “prospecciones en distintas enfermedades”:

Las vacunas ARNm se han usado para salvar a la Big Pharma

Las vacunas ARNm se han usado para salvar a la Big Pharma

El declive terminal de la industria de la Big Pharma

Ahora, dado que la disminución constante en el retorno de la inversión en I+D farmacéutica sigue la  Ley de rendimientos decrecientes como la consecuencia natural e inevitable de cómo priorizamos las oportunidades de inversión en I+D, ¿dónde deja eso a la industria? Bien, en la gráfica siguiente vemos como evoluciona el rendimiento de la inversión (IRR) a lo largo del tiempo para el mercado farmacéutico:

Las vacunas ARNm se han usado para salvar el negocio farmacéutico

¡Guau! Lo que vemos es que toda la industria farmacéutica está al borde de un declive terminal, ¡y ya comenzará a contraerse en los próximos 2 o 3 años!

Recuerden: El estudio es del año 2017, hace ahora en 2023 seis años. Quiere decir que la Big Pharma ya estaba en declive terminal en 2020 cuando la crisis del coronavirus (me resisto a llamarlo pandemia), observen el máximo en el gráfico..

Esto parece increíble, pero recuerde que este no es un pronóstico sombrío arbitrario. Es el  resultado matemático directo de la Ley de rendimientos decrecientes que ya hemos visto en nuestro análisis anterior y que hemos podido replicar exactamente al priorizar un conjunto limitado de oportunidades de inversión aleatorias.

Entonces, ¿qué está pasando aquí? ¿Puede esto realmente suceder?

Lo que tenemos aquí es una industria que está entrando en un  círculo vicioso de crecimiento negativo y declive terminal, ya que su modelo de negocio fundamental se ha quedado sin fuerza por la  Ley de rendimientos decrecientes: la disminución de la productividad en I+D y el rendimiento de la inversión conduce a un crecimiento decreciente en las ventas. Eventualmente, una vez pasado el máximo, el crecimiento se vuelve negativo y las ventas comienzan a contraerse. La reducción de las ventas reduce la cantidad de dinero disponible para volver a invertir en I+D, lo que hace que, otra vez, el crecimiento de las ventas disminuya aún más. Y así sucesivamente, hasta que la industria desaparezca por completo.

Este principio se ilustra mejor en la siguiente gráfica, que muestra cómo la creación de valor se está volviendo negativa a la vez que aumenta el valor agregado para los pacientes y, evidentemente, si la industria desapareciera ya no generaría valor ni para sí misma ni para los pacientes.

Las vacunas ARNm se han usado para salvar a la Big Pharma

La Covid la solución soñada

Esto no debería sorprendernos. Existen Ciclos de vida y regeneración para las industrias. Todas las industrias y modelos de negocios siguen la  Ley de Rendimientos Decrecientes, y muchas industrias han ido y venido a lo largo de la historia. De hecho, la propia industria farmacéutica surgió del declive terminal de la industria química y de tintes a medida que se mercantilizaba lentamente. De las cenizas crece lo nuevo. Pero para eso la Big Pharma necesita de la innovación para poder «extraer» de las enfermedades que hasta ahora no ha tocado porque no eran rentables (recuerden el gráfico de los pozos de petróleo).

Y ahí radica la única esperanza real para la industria farmacéutica, o al menos para las empresas y los cientos de miles de personas que trabajan en ella.

Las vacunas ARNm se han usado para salvar el negocio farmacéutico

Así como la industria farmacéutica evolucionó a partir de la industria química, y la industria biofarmacéutica ha evolucionado a partir de la industria farmacéutica, las industrias farmacéutica y biofarmacéutica juntas evolucionarán hacia algo bastante diferente, muy probablemente continuando la tendencia histórica de complejidad creciente hacia soluciones biológicas más complejas para Problemas urgentes de atención médica, como la terapia celular y génica, la ingeniería de tejidos, la medicina regenerativa, etc. etc.

Les suena la terapia génica, pues eso son las vacunas ARNm. Han venido para quedarse pero el sistema político de Salud en colusión con la Big Pharma ha precipitado su “uso de emergencia” ante la Covid haciendo de la humanidad su conejillo de indias. Los beneficios de la Big Pharma han sido espeluznantes al involucrar a toda la humanidad como cliente forzado.

=> Pfizer dobla sus ingresos y beneficios gracias a la vacuna del Covid-19

Que no nos engañen, no se ha aplicado “la ciencia” se ha aplicado “la prisa”. La prisa de la Big Pharma para cambiar su obsoleto modo de negocio y la prisa que generaron los responsables de salud pública magnificando una epidemia que no era más que otra simple gripe con escasa mortalidad.

Lo terrorífico que ya empezamos a sospechar es que haya habido connivencia e incluso reparto de ganancias entre los políticos, los prebostes de la FDA y los CDC con la Big Pharma. Ya ven que están investigando a la Von der Leyen, Fauci y Bill Gates deberían ir detrás.

Fusiones y adquisiciones en la Big Pharma: Evasión de riesgos y aumentos de precio

Ya en el año 2017 Pfizer decidió que era demasiado arriesgado invertir en I+D para descubrir y desarrollar un fármaco y que además le estaba costando mucho más que antes hacerlo, como hemos visto en los párrafos precedentes. Así que Pfizer y otros gigantes farmacéuticos empezaron a convertirse máquinas insaciables de fusiones y adquisiciones, comprando y vendiendo medicamentos inventados por otras empresas emergentes.

Ese mismo año, Pfizer adquirió Allergan, el fabricante de Botox, con sede en Dublín, por $160 mil millones. lo que depermitirá que el grupo estadounidense se haga con el botox y reduzca sus impuestos a través de una «inversión» en el buen domicilio fiscal irlandés – menores impuestos e incentivos fiscales a la inversión- . Es igualmente un síntoma del frenesí de fusiones y adquisiciones que se ha apoderado de la industria en los últimos dos años (de 2015 a 2017), con empresas haciendo fila para ofertar en subastas por valiosas patentes.

En lugar de arriesgarse invirtiendo ellos mismos en el descubrimiento de fármacos, algunos esperan hasta que una empresa biofarmacéutica más pequeña lo haya hecho y luego intentan comprar los derechos. Es menos arriesgado e incierto para los inversionistas pero también tiende a ser extremadamente costoso. AbbVie, por ejemplo, pagó 1.000 millones de dólares por Pharmacyclics este año, en gran parte para adquirir un único tratamiento contra el cáncer de sangre.

Tenía más sentido confiar en las empresas emergentes para descubrir la nueva generación de medicamentos contra el cáncer y el corazón, y luego incorporarlos. Daba igual que el producto se encareciera porque lo compensaba la casi ausencia de riesgo y se podía hacer m´ñas caro porque los productos farmacéuticos tienen menor elasticidad precio. Al ser bienes necesarios la gente está dispuesta a pagar más por ellos y la demanda se retrae muy poco.

En esto llegó el Covid en 2020 y las vacunas ARNm en 2021 con «autorización de emergencia», lo que ha permitido duplicar los beneficios a Pfizer. Con lo que ahora, en 2023 tiena cash de sobra para seguir con sus fusiones y adquisiciones de empresas emergentes que le hacen el trabajo de riesgo de invertir en I+D. Además, si nadie lo para por vía judicial por las muertes que ha ocasionado su vacuna, tendrá una grandioso camino por delante desarrollando terapias génicas con nuevos productos ARNm u otros. Habrá dado el salto de innovación que necesitaba para salir de su declive de rendimientos decrecientes.

Un negocio tan redondo como el globo terráqueo, y tan oscuro como un negro pozo de petróleo corrompido. Un canchullo execrable por el reguero de muertos que ha dejado por el camino.

(FiN) Las vacunas ARNm se han usado para salvar a la Big Pharma

FiN

SOURCE: Pharma’s broken business model: An industry on the brink of terminal decline

España: Exceso de muertes con Vacunas Covid