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«Metaverso» y globalismo

02/12/2021

Escritor Español Petrusvil

Poeta, escritor, divulgador y analista.
Tiempo de lectura 2 minutos.
Metaverso y globalismo

Quiso el facebookero visionario de frente en exceso despejada ponerle un nombre pomposo a su última vacilada virtual y pensó en otro universo liberado de la esclavitud del espacio-tiempo, soñó una enormidad aun más eterna, y le puso ‘meta’ – qué mejor que prefijarlo en griego, la lengua de los dioses- y dotole de un sufijo que le diera el aura de ex novo universo, la madre de todos los universos. Si esto es ‘más que universo’ – pensó en el diván de sus quiméricas ideaciones- será el ‘Metaverso’. Algo así como un “más allá” de la historia humana pretérita, como constructo nuevo e inventado, libre e inmaculado de toda rémora cultural, tradicional o patriarcal. ( Metaverso y globalismo )

El nombrecito constituye una potente metáfora de las ideas globalisteas que vacían de contenido la humana vida. Evasión, consumo y endiosamiento para deleite hedonista de plebes sumisas. ¡Gozad! ¡Disfrutad malditos de mi virtualverso! Abandonad por fin la vida real contingente, doliente, insidiosa y compleja, y convertirla en una imaginada e ilesa, virginal, criatura, vuestro Avatar.

Alejad las preocupaciones e impostar vuestras vidas. La alienación definitiva, el hombre desprovisto de su humanidad física se reconstruirá virtualmente a imagen y semejanza de lo que le apetezca ser. En el “ex nihilo” Avatar se completa un acto de creación sibilino que suplanta a Dios y se soporta en la autóctona y ensoberbecida voluntad de poder del hombre. El renacer del hombre nihilista que al no creer en nada se permite crearse a sí mismo. Semeja la farsa de un nuevo e imaginario Renacentismo con el Humanismo quemado en la hoguera de la vanidad humana e insanamente rehecho sobre sus propias cenizas.

Metaverso y globalismo

Estaremos literalmente en otra dimensión vital humana, una que nos plantearán ellos – la élite globalistea- porque si bien yo crearé mi Avatar, el Metaverso será creado por los “humanos superiores” apoyados en la tecnología de los gurús de las High Tech. El mundo virtual, la definitiva Jauja imaginaria, donde “Suckerberg” – el sorbedor de almas- quiere que consumas, compres, te diviertas y trabajes.

La farsa es tan distópica, tan irreal que conllevará riesgos innumerables y ciertos para la salud mental, física, social y emocional de los seres que, ex novo, nazcan en el Metaverso virtualizado. El globalismo encontraría la horma definitiva para esclavizar al hombre con un trasunto de mundo huxleiano donde el soma será una vida de mentira.

El invento es una trampa saducea de la que sería difícil salir una vez atrapados en ella. Sería una distopía embriagante porque otorgaría la válvula de escape utópica al ser postmoderno sito en un existencialismo triste. El hombre como ser no creado a sí mismo, creado por otro, está sometido a las contingencias y a la temporalidad indubitable de su vida. Sin embargo, el constructo del Metaverso desata al hombre de su historia elevándolo sobre la nihilidad de la muerte inevitable que es vencida por la tecnología. En la evasión virtual el hombre vencería a la muerte, ocultándosela, sisándosela a su realidad al residir en un mundo imaginado.

El globalismo tendría ya el instrumento perfecto para perpetar sus planes para la claudicante sumisión de la raza humana.

Metaverso y globalismo

FiN

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