
Las «teorías de la conspiración» de COVID ahora se han convertido por arte de magia en la narrativa principal «verificada con hechos». (Covid – Parece que hemos dejado de ser conspiranoicos)
En lo que va de 2022, muchos estados de EE. UU., y países como Suecia, Noruega y Dinamarca, están levantando las restricciones covid.
Y la narrativa de los medios de comunicación, declaraciones de los responsables de salud y comentarios en redes sociales están cambiando muy rápidamente. Cosas que poco antes eran tachadas de conspiranóicas se están empezando a aceptar:
- Ahora que la ola de Omicron está acabando ya hablan de pasar de las restricciones impuestas a la libertad de elección personal. Reconocen que si bien la covid-19 causa enfermedades y demás medidas han causado daños económicos y personales.
- Ya reconocen también que si bien las máscaras pueden reducir las infecciones respiratorias y también que pueden tener daños no deseados.
Covid – Parece que hemos dejado de ser conspiranoicos
- Empiezan a pensar en eliminar las restricciones y las mascarillas que se han impuesto a los niños; porque el riesgo para su salud mental, la pérdida de aprendizaje, ese tipo de cosas ahora son mayores que el virus mismo. Antes los que hablábamos del escasísimo riesgo en los niños éramos censurados.
- Ahora que Omicron ha actuado como una «vacuna natural» empiezan a hablar de la inmunidad natural después de dos años ninguneándola. Y he aquí que, como señaló The Hill esta semana , los CDC están, de repente, comenzando a hablar sobre la inmunidad natural. Un informe publicado por los CDC el 28 de enero de 2022;, “finalmente reconoce lo que muchos han sospechado durante mucho tiempo: que sobrevivir al COVID-19 proporciona una excelente inmunidad natural; no solo para repetir la infección sino también para la hospitalización y la muerte por la variante delta de COVID-19.” Ahora dicen lo que ya sabíamos y que han negado durante mucho tiempo.

Pero ya hace muchos meses que sabemos acerca de la robusta inmunidad proporcionada por la inmunidad natural. Los estudios a mediados de 2021 mostraban una inmunidad «duradera y robusta» de la inmunidad natural. Según una gran recopilación de datos y ensayos del Dr. Larry Istrial en su publicación » Inmunidad natural contra el Covid 19: una inmersión profunda «; los estudios que datan de 2020 continuaron confiriendo que la inmunidad natural contra el Covid era efectiva.
- Recuerdan cuando cuestionar si las personas estaban en hospitales por Covid o con Covid se descartó como una teoría de conspiración en 2020? Pues ahora ya hablan de diferenciar muertes por Covid de muertes por otros motivos sólo que con PCR positiva incluso meses antes.

Covid – Parece que hemos dejado de ser conspiranoicos


- Luego, por supuesto, estaba la «teoría de la conspiración» de la filtración de laboratorio que, después de costarle a muchas personas sus cuentas de redes sociales; ahora ha sido ampliamente aceptada como la principal génesis probable de Covid-19.

Descubrimos que EcoHealth Alliance de Daszak estaba en el centro de la investigación de ganancia de función que se estaba llevando a cabo en el Instituto de Virología de Wuhan. Así mismo, en junio de 2021, Forbes escribió que la filtración del laboratorio era una teoría de la conspiración. Sin embargo, ahora sabemos, según un informe del Telegraph del mes pasado;, que los científicos creían que Covid se filtró de un laboratorio, pero no querían interrumpir la «armonía internacional» discutiéndolo:

- Entre las otras «teorías de conspiración» estaba la idea de que las máscaras de tela no funcionan, ahora son parte de los puntos de conversación de la corriente principal.
- Ni la Ivermectina ni la hidroxicloroquina servían para mitigar la Covid pero ahora veremos un gran cambio de dialéctica al respecto, a favor de la ivermectina e hidroxicloroquina para su uso . en el tratamiento de Covid, como se ha respaldado en documentos DARPA filtrados recientemente.
- Ahora resulta que las vacunas, si bien son útiles para reducir el daño la primera vez que alguien contrae el virus;, también conllevan efectos secundarios sustanciales y pueden hacer más daño que bien cuando se administran a personas que ya han sido infectadas con COVID. ¿Cuántas veces nos han estigmatizado por decir eso? Ahora se empieza a hablar del riesgo de miocarditis en niños y jóvenes y no tan jóvenes.
Covid – Parece que hemos dejado de ser conspiranoicos
Aparte de la histeria política que ha sido insuflada en las masas junto con el terror colectivo inducido por los medios de comunicación, si hay algo que ha estado plagada la pandemia, ha sido de hipocresía.
Lo que comenzó como una pequeña muestra de hipocresía con la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi,;yéndose a arreglar el pelo después de cerrar todos los salones de belleza en el estado que representa; finalmente se convirtió en lo habitual: Políticos que ignoran sus propios mandatos y adoptan un elitista «hacer lo contrario de lo que impongo», muchos de ellos pillados in fraganti.

Cualquiera que se atreviera a cuestionar la narrativas «oficiales» de los prebostes de salud pública y la OMS rápidamente fue marginado y enviado a campos de reeducación en las redes sociales en forma de suspensiones o prohibiciones absolutas.
Covid – Parece que hemos dejado de ser conspiranoicos
Muchos ciudadanos, incluso médicos, que discrepaban o, simplemente, usaban el sentido común y el pensamiento crítico no solo fueron tachados de locos y conspiranoicos, sino que también perdieron sus trabajos o sus cuentas en RR.SS.
Sorprende el cambio en el discurso con la Covid pero más aun que se ellos se creen sus cambios de opinión. Desdecirse y decir lo contrario sin inmutarse forma parte de esta sociedad profusamente relativista.
Para los que nos hemos mantenido en nuestras ideas la variabilidad de los otros no sólo es sorprendente sino que nos repugna. Detrás de todo eso solo ha habido ignorancia, incompetencia, imposición grosera, histerismo o intención dolosa.
La única pregunta que queda sobre toda la falaz narrativa es: ¿para qué fue todo? ¿Vacunar al mundo? Cuanto menos fue una insensatez y cuanto más – sigamos con las sensatas y sanas «teorías de la conspiración»- parece que detrás había intenciones espurias o un plan globalista.
Covid – Parece que hemos dejado de ser conspiranoicos
FiN