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El físico italiano Alessandro Volta, tiene el honor de haber inventado la primera batería eléctrica del mundo. La «pila voltaica» que creó proporcionó la primera fuente de corriente eléctrica continua que el mundo jamás había visto hasta ese momento. (El hombre que inventó la batería eléctrica – Alessandro Volta)
El hombre que inventó la batería eléctrica – Alessandro Volta
Con este descubrimiento, Volta desacreditó la teoría que prevalecía hasta ese momento que postulaba que la electricidad era generada únicamente por seres vivos. El invento de Volta sentó las bases para las baterías modernas. Su trabajo también ayudó a crear la ciencia de la electroquímica y el electromagnetismo.
Alessandro Giuseppe Antonio Anastasio Volta nació el 18 de febrero de 1745 en Como, una ciudad al norte de Italia. La familia de Volta era de la nobleza y rica. De niño asistió a un internado jesuita, donde sus maestros trataron de captarle para el sacerdocio. Pero Volta sabía que su verdadera pasión era la física y, con 16 años, dejó la escuela.
A pesar de no recibir más formación, Volta comenzó a intercambiar cartas con los principales físicos de la época cuando tenía 18 años. Con 20 años, Volta ya estaba realizando experimentos en un laboratorio de física construido por su rico amigo, Giulio Cesare.
En 1774, Volta enseñaba física experimental en la escuela primaria pública de Como. lEn un principio, el trabajo de Volta se centró en la química de los gases. En 1778, después de leer un artículo escrito por Benjamin Franklin sobre el tema del «aire inflamable», Volta descubrió y luego aislar el gas metano. Volta descubrió que una mezcla de metano y aire podía explotar con una chispa eléctrica cuando se encontraba en un recipiente cerrado. Este tipo de reacción química exotérmica inducida eléctricamente se convertiría más tarde en la base del motor de combustión interna.
El hombre que inventó la batería eléctrica – Alessandro Volta
En 1779, Volta fue nombrado profesor de física experimental en la Universidad de Pavía, cargo que ostentó durante casi 40 años. Volta pasó sus primeros años en Pavía estudiando lo que ahora llamamos «capacitancia eléctrica». Encontró que el potencial eléctrico en un capacitor (el capacitor es un componente que tiene la “capacidad” de almacenar energía en forma de carga eléctrica) es directamente proporcional a su carga eléctrica. Hoy este fenómeno se llama Ley de la Capacitancia de Volta.
En 1791, el amigo y compañero físico de Volta, Luigi Galvani, descubrió que podía hacer que una pata de rana montada en ganchos de hierro o latón se contrajera cuando la pata se tocaba con una sonda hecha de otro metal. Galvani interpretó su descubrimiento como una nueva forma de electricidad que se puede encontrar en los tejidos vivos y la denominó “electricidad animal”. Volta no estuvo de acuerdo con los hallazgos de Galvani. Él planteó la hipótesis de que la rana simplemente conducía la corriente eléctrica que fluía entre el gancho de hierro o latón y el otro metal que se usaba como sonda. Volta llamó a este tipo de electricidad “electricidad metálica”.
A raíz de esto Volta comenzó a experimentar para ver si lograba producir una corriente eléctrica conectando metales. Como los instrumentos en ese momento no podían detectar corrientes eléctricas débiles, Volta probó el flujo de electricidad entre diferentes metales colocándolos en su lengua. Efectivamente, Volta encontró que la saliva en su boca, como el tejido de las ranas en los experimentos de Galvani, conducía electricidad, causando una sensación amarga.
Para demostrar de manera concluyente que una corriente eléctrica no requería un tejido animal, Volta creó una pila de discos alternos de zinc y plata, que estaban separados por un paño empapado en salmuera. Volta descubrió que cuando se conectaba un cable a ambos extremos de la pila, fluía una corriente constante entre las capas. Este invento, que llegó a conocerse como pila voltaica, fue en realidad una forma temprana de la batería eléctrica actual. Después de numerosos experimentos, Volta también descubrió que la cantidad de corriente producida podía aumentar o disminuir usando diferentes metales o agregando y quitando discos de la pila.
El hombre que inventó la batería eléctrica – Alessandro Volta
La batería de Volta tuvo un gran éxito. No solo destruyó el consenso científico sobre la «electricidad animal», sino que los científicos rápidamente reconocieron, a lo que se llamó «el órgano eléctrico artificial» de Volta, como un dispositivo extremadamente útil.
Tan sólo seis semanas después del anuncio de Volta, los científicos ingleses William Nicholson y Anthony Carlisle utilizaron su propia pila voltaica para descomponer el agua en hidrógeno y oxígeno, lo que condujo al descubrimiento de la electrólisis o “una técnica que utiliza una corriente eléctrica directa para impulsar un sistema que de otro modo no sería reacción química espontánea” y así creó el campo de la electroquímica. De manera similar, en la década de 1830, otro científico inglés, Michael Faraday, utilizó la pila voltaica en sus innovadores estudios sobre electromagnetismo.
Napoleón Bonaparte quedó tan impresionado con el trabajo de Volta que lo nombró conde en 1801 y senador del reino de Lombardía. En 1809, Volta también se convirtió en miembro asociado del Instituto Real de los Países Bajos.
Jubilado en 1819, a la edad de 74 años Volta se mudó a su finca en Camnago. El 5 de marzo de 1827, Volta murió a la edad de 82 años. Desde su muerte, Volta ha aparecido en sellos y monedas. Su nombre quedó inmortalizado cuando la medida del potencial eléctrico, o «voltio», recibió su nombre en 1881.
La invención de Volta de la primera batería no solo ayudó a sentar las bases para la creación de varios campos científicos, sino que la batería se ha convertido en un elemento básico del mundo moderno. Sin el trabajo de Volta, muchas de nuestras tecnologías modernas no existirían.
El hombre que inventó la batería eléctrica – Alessandro Volta
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El primer reactor nuclear – Enrico Fermi
