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La ciencia del clima era un rincón oscuro y sin importancia de la academia de las ciencias hasta que los profesores tuvieron suerte con el calentamiento global. La idea del calentamiento global encendió una chispa en el gobierno y los medios de comunicación y prendió en un incendio incontrolable. El dinero y la influencia inundaron desde los Estados a las academias de ciencias del clima. (El cuerno de la abundancia del Cambio Climático: La ciencia basura.)
En su discurso de despedida en 1961, el presidente Dwight D. Eisenhower advirtió contra la dependencia de la élite científico-tecnológica de las subvenciones del gobierno. Eisenhower temía que la élite usara su influencia y experiencia para distorsionar las políticas públicas en su propio beneficio. Eso es exactamente lo que está sucediendo con el Cambio Climático. El calentamiento global renombrado Cambio Climático es solo uno de los muchos fraudes científicos actuales que mejoran el bienestar de los científicos, los burócratas y de las élites que promueven tanto la fraudulencia climática como otras variopintas glosadas en la Agenda 2030.
Desde la Segunda Guerra Mundial, el creciente flujo de grandes cantidades de dinero desde los estados ha contribuido a un cambio gradual en el carácter de las universidades de investigación. El dinero se volvió más importante que la ciencia. Los administradores que estaban enfocados en el dinero y el poder crecieron en número y se volvieron dominantes. Este cambio de carácter fue documentado en un importante ensayo del científico del MIT Richard Lindzen.
El calentamiento global proporcionó a los profesores y administradores académicos una gallina de los huevos de oro de la ciencia basura. Estaban decididos a impedir que nadie matara a la gallina.
El cuerno de la abundancia del Cambio Climático: La ciencia basura
Se desarrolló una narrativa para aplastar a los “negacionistas” que se atrevieron a cuestionar la narrativa del calentamiento global. A muchos luchadores contra el fraude del calentamiento global no les gusta la etiqueta «negacionista». Lo consideran un intento de la multitud del calentamiento global de agrupar a sus oponentes entre los que niegan el Holocausto. Mi sensación es que bien podríamos llevar la etiqueta con orgullo y así destruir su eficacia.
Nosotros, los negacionistas, venimos de un pequeño contingente de personas con personalidades argumentativas, formación científica y un trabajo o ingresos que nos proporcionan cierta inmunidad a las represalias. Los negadores son versiones adultas del niño que decía que el «emperador iba desnudo».
Es fácil para el establecimiento representar a los negadores como chiflados. ¿Quiénes son ellos para desafiar el consenso científico? Que unos cuantos negadores en realidad sean chiflados no ayuda. Pero hay muchos más chiflados que promueven miedos climáticos falsos, muchos de ellos en los rangos más privilegiados de la sociedad humana.
Los grupos de científicos del clima han estado gastando miles de millones de dólares en el desarrollo de modelos informáticos de la atmósfera terrestre en un intento de respaldar la narrativa del Cambio Climático. Los modelos informáticos obedecen a sus autores. Los científicos pueden manipular los modelos para mostrar cualquier resultado que respalde la conclusión deseada: calentamiento global o enfriamiento global. Kevin Trenberth, ex jefe de modelado en el Centro Nacional de Investigación Atmosférica (NCAR), pudo haber aclarado la situación cuando dijo: «Ninguno de los modelos… corresponde ni remotamente al clima que observamos actualmente».
El cuerno de la abundancia del Cambio Climático: La ciencia basura
La belleza de un programa de computadora de caja negra con cientos de miles de líneas de código es que es difícil saber si es un trabajo increíble o un ejercicio vanamente inútil.
Los científicos académicos no se atreven a criticar nada que aporte dinero a su organización. Cuando lo hacen, aprenden rápidamente lo que es perder los fondos que les sostienen.
El científico promedio que promueve el calentamiento global realmente cree en el calentamiento global. Es fácil creer en doctrinas que traen dinero a raudales. Los académicos fuera de la ciencia del clima que podrían desafiar el fraude del calentamiento global prefieren guardar silencio. Criticar la ciencia basura de otra persona es peligroso para aquellos que viven en acomodados invernaderos subvencionados.
Los científicos climáticos profesionales que son abiertamente críticos con la narrativa del cambio climático están jubilados o tienen una distinción científica tal que es imposible despedirlos. Que yo sepa, no existe tal cosa como un científico climático crítico que se encuentre al principio de su carrera. Tal aspirante a científico no duraría mucho.
Hay organizaciones que luchan contra el fraude del calentamiento global, pero no tienen la ventaja de miles de millones de dólares gubernamentales para difundir su mensaje. Siempre están bajo el ataque de aquellos apoyados con gran estilo por la ciencia del gran gobierno. El Instituto Heartland y la Coalición CO2 son dos de las muchas organizaciones negacionistas.
El cuerno de la abundancia del Cambio Climático: La ciencia basura
Existen numerosos sitios web dirigidos por negadores o grupos de negacionistas. Uno de los mejores, realclimatescience.com , está dirigido por el ingeniero eléctrico Tony Heller. Él expone de manera hilarante las mentiras de la multitud del calentamiento global, así como el sensacionalismo de los medios. Su especialidad es exponer la manipulación de los datos climáticos para que coincidan con la teoría del calentamiento global. Si una teoría no está de acuerdo con los datos del mundo real, la manipulación de los datos es un método para promover el fraude.
La gente es engañada por profetas o gurús que pretenden tener un entendimiento más allá del de la gente común. No veo el fin de la ciencia basura porque hay demasiado dinero en ella y las instituciones creíbles que podrían desmontarla carecen de objetividad y experiencia. El sesgo ideológico de los principales medios de comunicación los atrae a cualquier teoría chiflada que pida más dinero y poder del gobierno movilizados para resolver el “problema”. Para ellos, la narrativa del Cambio Climático es maravillosa porque proporciona una excusa para que los gobiernos regulen sobre casi todo.
FiN
El cuerno de la abundancia del Cambio Climático: La ciencia basura
El Gran Fraude del Calentamiento Global
